miércoles, noviembre 10, 2004

El descanso (imprescindible) del guerrero

Incluso en este mundo cambiante resulta indispensable parar y reposar, aunque sólo sea para asimilar, para digerir la ingente cantidad de información que nos inunda. Es por eso que en medio de la velocidad a la que nos vemos obligados a movernos, y a la que necesariamente hemos de acostumbrarnos, en ocasiones es preciso parar, aun por el mero hecho de poder observar y disfrutar como simples espectadores de la extraordinaria evolución de todo lo que nos rodea, y si procede, cambiar nuestra perspectiva de las cosas. Muchas e importantes pasan por delante de nuestros ojos sin que seamos conscientes de ello, y todo porque no estamos mirando ni cuando, ni donde, ni como debemos.

En definitiva, contemplar adecuadamente, y obrar en consecuencia.

2 comentarios:

  1. Qué callado te tenías esto del blog... ¡Bienvenido al club!

    Te contaré una anécdota que me pasó ayer mismo a propósito de estar atentos en todo momento: cuando doy clase me gusta mirar a la audiencia, ver si entienden, no entienden o simplemente pasan de lo que les cuento (que es lo más normal). Pues bien, en el momento que dejé de mirarles, para escribir unos números en la pizarra... uno/una se levantó y se fue, sólo noté una sombra corriendo fuera de mi campo de visión. Luego pregunté a la clase: '¿se ha ido alguien, verdad?' Respondieron afirmativamente y repliqué: 'pues podía haberse despedido, que cuesta poco'. Y la clase continuó :)

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  2. Si no haces por que las cosas ocurran...sencillamente ocurrirán, pero sin tí.

    "tempus fugit"

    Maximilian de Robespierre

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